domingo, 28 de abril de 2013

Manuel Garces

http://manuelgarcesblancart.blogspot.com.es/



Angel Moreno

Pensando en los Demás.



Un documental lleno de matices, ternura, realidad y de cómo actúa un verdadero profesional en su campo.  Sin duda la actividad de este profesor como educador es indudable, creando una ambiente muy participativo en clase y eliminando tapujos, discriminaciones y trabajos forzados.
Creo que todos hemos echado de menos a un profesor asín en nuestra infancia, que te inculque felicidad y capacidad para expresarte con los demás y ayudar a solucionar problemas. En mis recuerdos solo halla educadores que se bastaban con castigos de copiar frases tremendamente inútiles o imponiendo el derecho de no salir al patio a la hora del recreo.  El problema pienso yo en este campo de la educación que no todo el mundo está capacitado para desempeñar esta función, la mayoría acaban por solucionar las cosas por la rápida. El video es un claro ejemplo de cómo una persona con aptitudes y actitudes para la enseñanza es capaz de crear un ambiente escolar a veces extraordinario para nosotros.
Los niños aprenden en un entorno donde no existe la tirania del profesor e impone su palabra ante todo, si no que los alumnos desde bien temprana edad crean un capacidad de razonamiento indudable y son capaces de convencer a su tutor.
Por otra parte esta clase de impartir enseñanza no es muy rentable para los gobiernos de ahora, pues se crea un generación de libre pensadores capaces de razonar y divulgar conceptos que  para un gobierno manipulador  lleno de mensajes con dobles sentido llegaría a su fin.
Pero lo importante de esto es tener la capacidad de observar lo gratificante que es  todo el contenido del video.  Ya que no hemos tenido la oportunidad de tener una educación asín , por lo menos ahora ser críticos con uno mismo, ser aunténtico y original y ser consciente de todo lo que nos rodea .

Angel Moreno

domingo, 7 de abril de 2013

"El Alquimista" de Paulo Coelho


Hace poco leí “El Alquimista”, una novela de Paulo Coelho que me habían recomendado. Mucha gente habla de él como uno de los mejores libros que han leído pero, en mi opinión, me pareció muy lento y aburrido.

Es fácil de leer, tiene una narrativa sencilla pero alargan mucho algunos acontecimientos. Tiene una buena moraleja, te enseña a no tener miedo a alcanzar nuestra “leyenda personal” (algo así como el elemento que describe ken robinson) aunque el trayecto sea largo y complicado.

El protagonista sufre varios sucesos difíciles para llegar a su destino, origen de un sueño que tuvo. En su viaje irá en busca del alquimista, quien le dicen que le ayudará a buscar su “leyenda personal”. Un alquimista transforma el plomo en oro, aquí es una metáfora de la búsqueda y transformación de uno mismo.




Raquel López

miércoles, 3 de abril de 2013


Comentario video  “Pensando en los demás”

Toshiro Kamamori me parece que es un fantástico profesor y que mantiene una relación muy especial con los alumnos. Los niños le tienen respeto y verdaderamente impone de manera sabia, los niños se sienten mal cuando hacen algo mal porque realmente tienen cariño al profesor. Existe una unidad tremenda entre los alumnos, como cuando uno de ellos es castigado sin salir a una actividad y todos deciden no ir si uno no va. Les enseña a madurar tratando temas tan fríos y fuertes como el de la muerte, saben afrontar problemas y poner sus pensamientos y sentimientos en común mediante esas cartas que sirven para desahogarse y todos se encuentran receptivos ante los problemas de los demás. Se preocupa por los conflictos entre alumnos y fomenta la reconciliación les hace sentir culpables. La importancia de la palabra vínculo para él hace que se cree una piña fortísima entre los alumnos.

Hace posible la mezcla entre trabajo y diversión gracias a iniciativas que podemos calificar artísticas como la construcción de un barco donde todos participan y luego utilizan en una piscina. También crean una canción de despedida para una de las alumnas que tiene que abandonar el colegio por motivos personales o la creación de una carta sobre la arena ,  hace que trabajen la creatividad y a la vez de diviertan.

Por la manera y la ternura a la hora de trabajar pienso que verdaderamente la docencia es un trabajo demasiado vocacional, hay que implicarse de la manera que el señor Kamamori lo hace y sobre todo disfrutar de la evolución de esos niños sabiendo que gracias a él en el futuro serán personas decentes y educadas y que no solo enseña las materias escolares sino también educa a los alumnos como personas. Es una de esas personas que seguramente marcará la vida de todos los alumnos que tengan el placer de haber disfrutado de sus clases.

Jose Miguel Calzado Peralta

jueves, 28 de marzo de 2013

la Ventana de Johari


El otro día hicimos una curiosa actividad en clase que nos ayudó a conocer a los demás y cómo nos ven.

Consistía en que cada uno en un folio dibujaba un autorretrato de cómo nos veíamos nosotros mismos, podíamos hacerlo como quisiéramos, podía ser figurativo, realista o monigote, una frase…
Luego lo teníamos que pasar a los demás compañeros y tenían que escribir o dibujar detrás cómo nos veían ellos. Algunos nos conocíamos más y sabíamos cómo representarlos y otros que conocemos poco o nada nos valorábamos superficialmente, es decir, la impresión que dábamos.

¿Cómo nos vemos? ¿Cómo nos ven los demás? ¿qué conocemos de nosotros? ¿qué desconocemos?

Existe una “herramienta” que usan los psicólogos normalmente para grupos de autoayuda y en ejercicios de dinámica de grupo llamada LA VENTANA DE JOHARI.

Esta “herramienta” nos ayuda a conocer nuestra personalidad y la de los demás, a entender aquellas cosas que nos desconciertan de los demás. Según esta teoría, todos poseemos 4 áreas en nuestra personalidad: “libre”, “oculta”, “ciega” y “desconocida”.

La libre es aquella que mostramos a nosotros y los demás. Lo que conocemos bien de nosotros mismos (gustos, ideas,…).

La oculta son los sentimientos, lo personal, nuestros deseos, secretos...lo que no queremos compartir con los demás, a no ser que tengamos mucha confianza con otra persona.

En la ciega está lo que ven los demás de nosotros pero no lo vemos nosotros mismos. Las impresiones que damos, complejos…aspectos que no quieren ser reconocidos pero que lo ven los demás.

La desconocida no la conocen ni nosotros ni los demás. Puede tratarse del inconsciente, nuestro espacio personal privado.

Estas 4 siempre están enlazadas. Cualquier cambio en una de estas afectará a las demás. La cuestión es ampliar el primero (el área "libre") y reducir así lo desconocido. Si nos abrimos más a los demás nos conoceremos mejor.

Raquel López


domingo, 24 de marzo de 2013

vídeo "Pensando en los demás" de Noboru Kaetsu


La escuela es un lugar donde pasamos muchas horas de pequeños, por lo que es crucial todo lo que hagamos y aprendamos aquí dentro. Corregir nuestros errores, aprender a conocernos, relacionarnos y preocuparnos por los demás,… son valores que enseña el profesor japonés Toshiro Kanamori a sus alumnos.

Nada más empezar el curso, les dice a sus alumnos: ¿por qué estamos aquí? Para ser felices.

Kanamori piensa que cada vez se valora menos la vida y por eso enseña en su clase a valorarla. En estos tiempos, poseemos más cosas que antes y con los avances tecnológicos nos hace la vida más sencilla y, sin embargo, no somos mejor que antes como personas. Nos quejamos más, queremos controlarlo todo, nos preocupa más la impresión que damos a los demás antes que a nosotros, criticamos todo…Tenemos tantas cosas tanto material como en la mente que no nos dejan ver y apreciar lo que verdaderamente importa.  No nos gusta estancarnos, queremos estar siempre haciendo cosas y, al final del día, nos damos cuenta de que no hemos hecho apenas nada. Todo por no querer para un momento y escucharnos.  No queremos hacer pausas porque pensamos que perdemos el tiempo, pero ese espacio de tiempo que no hacemos nada pueden aportarnos un gran crecimiento personal, nos permite escuchar nuestro yo interior y entendernos a nosotros mismos.

Hay una actividad que realiza Kanamori llamada “las cartas del cuaderno”. Consiste en que sus alumnos escriben, cuentan y comparten en un cuaderno sus sentimientos con los demás compañeros, los cuales después pueden opinar. Es un curioso y original método de conocer a otros y a nosotros mismos. Pensar en los demás nos ayuda a ser felices. Normalmente, en cualquier otra escuela, solo existe el perfeccionismo y la competitividad. No saben solucionar problemas sin la ayuda de enunciados y apartados que les dice paso a paso cómo hacerlo, cualquier actividad fácil o difícil sólo tiene una solución cuando deberían de enseñarles a buscar varias, no importa que estés a gusto con lo que haces sino que cumplas los objetivos que te ordenan, creen que la vida es: 1ºcuatrimestre, 2ºcuatrimestre, 3ºcuatrimestre y verano o clases de recuperación para septiembre. así e infinitas cosas más. si no haces algo de eso o lo haces mal, piensan que eres inútil para eso, cuando realmente lo que pasa es que no le gusta o no le motiva y, al no motivarle, no hay interés y se esfuerza menos. todo esto por una falta de comunicación tanto en profesor-alumno como alumno-alumno que no trate de sumas, dictados, que si la savia elaborada de las plantas se produce con la mezcla de la savia bruta y dióxido de carbono (¿de qué demonios le sirve a un niño saber esto?!).

Por último, otro apartado importante que trata este profesor es sobre corregir nuestros errores. Les muestra que nadie es perfecto. No nos gusta equivocarnos, por lo que reconocerlo nos cuesta más. Aquí los alumnos buscarn y comparten sus defectos e invulnerabilidades. Es otra manera de conocernos a nosotros mismos, al igual que les ayuda a reflexionar sobre sus actos y respetar a los demás. Equivocarnos no es malo (aunque otros profesores de otras escuelas no te lo digan), aprender de nuestros errores nos permite ser mejores personas.

En conclusión, además de enseñar matemáticas, lengua,…enseñar conocimientos, deben de enseñar también a valorarnos a nosotros, a los demás, a la vida… a vivir.


Raquel López